Sensibilizar al plagio durante los estudios superiores

Cada profesor tiene un sólido poder pedagógico contra el fraude que supone el plagio: procurar que para sus estudiantes sea más difícil plagiar que hacer realmente el trabajo solicitado.

• Dejar claras las instrucciones de redacción y de citación en cada trabajo. Cuando las reglas en torno al contenido duplicado son explícitas y se recuerdan (paráfrasis, reformulación, comillas, bibliografía…), el riesgo de plagio disminuye bastante.
• Proponer temas originales e inéditos. Si los temas de trabajo son nuevos, los estudiantes no podrán volver a usar tareas realizadas anteriormente por otros.
• Suscitar el interés de los alumnos con temas de su elección. Realizando búsquedas sobre temas que les interesan, los estudiantes se sienten satisfechos de aumentar sus conocimientos personales y plagian menos.
• Comprobar los trabajos universitarios gracias al software antiplagio Magister de Compilatio. Dentro de un proceso pedagógico, para incrementar el diálogo profesor-estudiante y favorecer el aprendizaje, antes de la entrega final.
• Implementar una presentación oral de los trabajos de investigación. La presentación oral de una tarea con intercambio de ideas entre profesor y estudiante permite comprobar la asimilación de los conocimientos.

 Para combatir el plagio y luchar a favor de los derechos de autor, la pedagogía resulta el arma más eficaz.